Cherreads

Chapter 14 - Capítulo 14 Epilogo, Naruto Xion

Capítulo 14 Epilogo, Naruto Xión

 

Un día después de aclarar los asuntos sobre su descendencia

con Hinata para evitar cualquier obstáculo debido a las posibles habilidades de

sus hijos, Naruto comenzó sus planes de conquista mundial. Él distribuyó clones

por todo el continente, pero esto solo era el comienzo del plan.

La conquista no comenzaría hasta dentro de un mes, cuando los

clones hubieran recopilado información sobre los gobernantes actuales y

estuvieran posicionados para capturarlos en un solo movimiento. Naruto se

consideraba un dios y no quería librar guerras innecesarias. Todos los señores

y sus representantes serían capturados.

En cuanto a su cuerpo principal, Naruto tenía asuntos que

atender. Con la colaboración de Pain, él apareció frente a dos hombres que

llevaban capas negras con nubes rojas: Kakuzu e Hidan, el dúo inmortal de

Akatsuki. Ellos caminaban por un camino de tierra en una zona boscosa y no

había nadie más cerca. Uno de sus clones los había localizado, y con las

coordenadas, Naruto llegó utilizando su dojutsu espacial. Hidan y Kakuzu se

sorprendieron al verlo aparecer usando el mismo dojutsu que Tobi.

Naruto no les dio tiempo para decir nada, y en un instante,

les arrebató sus almas. Contra este dojutsu, la inmortalidad del cuerpo no

tenía valor, y ambos cuerpos sin alma cayeron al suelo. Naruto los empaquetó

como material de investigación y los envió a su laboratorio con un clon. Con

las ocho puertas abiertas permanentemente y poseyendo un cuerpo de dios, ningún

ninja en este planeta podía siquiera soñar con percibir sus movimientos. Por lo

tanto, Naruto se movió hacia su próximo objetivo.

Kisame e Itachi estaban observando un puesto de un vendedor

ambulante en una plaza de mercado concurrida, donde se vendían vasijas de

barro. Esta ciudad pertenecía al País del Fuego y los alrededores estaban

llenos de gente. Al ver el espacio distorsionarse y a Naruto aparecer en el

lugar, la gente se apartó a los lados y los más astutos corrieron por sus

vidas, conscientes de que podría desatarse una pelea de ninjas.

—Gracias por esperarme —dijo Naruto mientras ambos ninjas se

daban la vuelta. Itachi ya tenía activado su Mangekyou Sharingan y Kisame

empuñaba su espada en sus manos.

—Parece que esto nos facilitará el trabajo —dijo Kisame con

una sonrisa, que se desvaneció cuando Naruto lo agarró del cuello sin que

pudiera verlo y ejecutó el Dojutsu de Robado del Alma.

—Itachi, cálmate. Sasuke se enfadará conmigo si tengo que

darte una paliza para llevarte de vuelta a la aldea, y Tsunade te partirá el

cuello si tiene que dar más explicaciones —dijo Naruto mientras absorbía el

alma de Kisame y los genjutsus lanzados por Itachi sobre no tenían ningún

efecto.

—Ya no será necesario que vigile a Akatsuki —dijo Itachi.

—Así es —dijo Naruto creando un clon que cargó el cuerpo de

Kisame—. Ve con el clon, te llevará a mi laboratorio para curar tus ojos y tu

enfermedad terminal —añadió.

—¿Has estado con Pain? —preguntó Itachi mirando sus ojos.

—Pain y yo hemos hablado, y él ha aceptado cambiar su plan

después de que le contara algunas verdades.

»Ahora, como jefe de la raíz, te ordeno que vuelvas a la

aldea y te reportes con Tsunade después de que te hayas curado. De lo

contrario, te daré una paliza y sufrirás la indignidad de ser arrastrado a su

oficina delante de tu hermano menor —advirtió Naruto por última vez.

—Creo que me gustaría tener una apreciación de tu poder…

—Itachi salió volando después de recibir veinte patadas suaves que le

fracturaron todos los huesos.

Un clon de Naruto creó otro clon que se acercó a Itachi, a

quien Naruto selló al golpearlo, y lo llevó a su laboratorio para curarlo y

luego arrastrarlo a la oficina de Tsunade. Ni siquiera el Mangekyou era capaz

de ver la velocidad de un dios, sumada a las ocho puertas abiertas. Era una

tontería que Itachi intentara enfrentarse a él.

Naruto observó su entorno. El mercado era un desastre. A

pesar de haber golpeado a Itachi hacia arriba, las ondas de choque de sus patadas

habían destruido los puestos de la plaza y habían derribado a una multitud de

curiosos que gritaban de dolor debido a las fracturas óseas.

Naruto creó cincuenta clones que se quedaron en el lugar,

curando a la gente y reparando los daños mediante el jutsu de creación de todas

las cosas, mientras él se movía nuevamente a través del espacio hacia un lugar

donde algunas personas lo esperaban.

—Hermano Panda, gracias por venir —dijo Naruto a Gaara, quien

era uno de los presentes en el lugar y uno de los tres que estaban allí por

voluntad propia. Los demás fueron arrastrados a la fuerza.

—¡Deja de llamarme Hermano Panda! —reprendió Gaara con una

expresión avergonzada cuando todos miraron sus ojos.

Algunos incluso asintieron comprendiendo su sobrenombre.

Naruto lo ignoró y miró a Kurama, quien seguía usando su antiguo cuerpo

Uzumaki. Naruto asintió para saludarlo y le tendió la mano. Kurama se la

sostuvo y asintió con una sonrisa llena de dientes.

—Esta vez los he arrastrado a todos. Recuperar mi parte

sellada ha sido de gran ayuda para eso —dijo Kurama señalando a sus

prisioneros, que estaban libres y llevaban armas. Pero cualquiera que intentara

moverse de allí sería tratado con violencia por él. Y como Kurama no era una

persona amable ni tenía fama de serlo, sus prisioneros eran muy obedientes.

Los prisioneros de Kurama eran: Yugito Nii, una mujer rubia

que era la jinchūriki de Matatabi, el Dos Colas. Le seguía Roshi, un hombre

pelirrojo en sus cuarenta con barba, quien era el jinchūriki de Son Goku, el

Cuatro Colas. Por último, estaba Utakata, un hombre de apariencia elegante y

serena que llevaba un kimono y era el jinchūriki de Saiken, el Seis Colas.

—Además de estos insensatos, están Killer B y Gyūki, quienes

han venido por voluntad propia y están dispuestos a colaborar —dijo Kurama.

Killer B, un tipo alto y musculoso, saludó con una pose

extraña. Gyūki, el Ocho Colas, materializó un tentáculo y también saludó. Ellos

eran los únicos dos que tenían una buena relación entre ellos.

—Hola a todos, soy Naruto Uzumaki, el anterior jinchūriki de

Kurama, aunque ahora nos hemos separado —se presentó Naruto y metió la mano a

un lado para sacar tres esferas selladas de su dimensión privada.

Las esferas eran sellos y Naruto las lanzó detrás del grupo. Los

sellos se liberaron y tres bestias de cola, en toda su altura, aparecieron

detrás del grupo. Eran Isobu, el Tres Colas, que parecía una extraña tortuga

dinosaurio acorazada; Kokuo, el Cinco Colas, que parecía un caballo gigante con

cabeza de delfín y cuernos; y Chomei, el Siete Colas, que era un saltamontes

acorazado gigante y parecía llevar un casco. En opinión de Naruto, Chomei era

el más feo de los bijū.

—¡Corran! —chilló Isobu al verse libre y ver a Naruto frente

a él.

Después de que los clones de Naruto le dieran una paliza para

capturarlo y traerlo consigo a la reunión, no se le ocurrió otra cosa que

escapar al encontrarse libre.

Kurama rugió y Isobu quedó paralizado, mirándolo.

—¿Kurama? —preguntó Isobu con tono aturdido.

—Isobu, ¡deja de avergonzarnos a todos y compórtate!

—reprendió Kurama.

Kokuo y Chomei, a quienes él rescató del interior del Jubi,

estaban más tranquilos y mostraban interés en saber qué estaba pasando.

—Bien, ahora que estamos todos, podemos hablar —dijo Naruto y

utilizó un genjutsu sobre todos los presentes.

El genjutsu conectó las mentes de todos y ahora se

encontraban en un espacio oscuro, los humanos al frente y los biju detrás.

Kurama se mostraba en su forma de Kyubi detrás de él. Los presentes se miraron

unos a otros. Shukaku bostezó.

—No estoy interesado en esta reunión, ya sé de qué se trata,

y estoy bien con este chico. Además, no planeo salir de la arena —dijo Shukaku.

—Yo tampoco estoy incómodo con mi estado actual, y Shukaku y

yo hemos entrenado duro para enfrentar cualquier invasión a este mundo —dijo

Gaara.

—¿De qué están hablando? —preguntó Roshi.

—De los Otsutsuki. Ellos son nuestro origen y es posible que

algunos de ellos lleguen a este mundo para destruirlo en algunos años más

—explicó Kurama mientras imágenes de los Otsutsuki flotaban sobre él.

—En realidad, ustedes solo serán un plan de respaldo en caso

de que yo sea derrotado. Aun así, desde hoy, los biju y sus jinchurikis tendrán

prohibido interferir en guerras humanas. Tampoco podrán ser utilizados en

contra de su voluntad para proteger las aldeas ninjas. Después de esta reunión,

cualquiera que desee permanecer solo, ya sea biju o jinchuriki, podrá hacerlo,

ya que soy capaz de separarlos —explicó Naruto, y todos comprendieron por qué

estaban allí.

—Yo solo quiero regresar a mi lago —dijo Isobu.

—Isobu, nuestro creador nos encomendó la seguridad de este

mundo —gruñó Kurama con tono amenazador.

—Puedo vigilar desde mi lago —replicó Isobu.

Al final de la reunión, los únicos que decidieron permanecer

juntos fueron Killer B y el Ocho Colas, y Gaara y Shukaku. Los demás optaron

por separarse, a pesar de que la combinación de un humano y un Biju era más

poderosa debido al apoyo de los jutsus del humano.

Naruto no podía hacer más que cumplir con sus demandas y

liberarlos bajo la condición de que no causaran ningún desastre, ya que al

final, decidir cómo vivir sus vidas era asunto de ellos.

Kurama decidió recorrer el mundo durante algún tiempo, pero

prometió visitarlos de vez en cuando. También intentaría convencer a los demás

de tomar un cuerpo humano para tener acceso a los jutsus, al igual que él.

Después de la reunión, Naruto regresó a la aldea junto a

Hinata, ya que uno de sus clones estaba coordinando la futura conquista del

continente con Pain, explicándole las nuevas leyes que deseaba implementar y el

nuevo sistema administrativo.

Al regresar a la aldea y con sus clones trabajando en su

nombre, Naruto no tenía mucho que hacer. Él no podía fastidiar a Hinata, quien

tenía sus responsabilidades como jefa del clan Hyuga, y solo podían dedicarse

medio día el uno al otro. Debido a esto, Naruto se aburrió y abrió un camino

hacia otra dimensión que Kaguya conocía, la cual planeaba utilizar para

entrenar su cuerpo.

Esta dimensión consistía en montañas heladas sin gente, donde

Naruto podía entrenar sin poner en riesgo la vida de otros.

Medio día después, Naruto regresó a su propia dimensión,

preguntándose si era el momento de ocuparse de la amenaza en la luna.

En la luna se encontraba Toneri Otsutsuki, el último

descendiente de Homura Otsutsuki, y era un radical que pretendía destruir la

Tierra si esta se desviaba de sus estándares de paz o guerra.

Como se acercaba su propia conquista, Naruto no quería

incidentes, así que decidió viajar a la luna. Una vez allí, no tuvo

dificultades para encontrar a Toneri, un hombre con el pelo blanco corto, piel

pálida y sin ojos. Toneri pasaba sus días cuidando de un artefacto llamado

Tenseiga, una gran esfera donde los miembros de su clan depositaban sus ojos

para obtener más poder, y con él derrotaron a la rama principal del clan.

En opinión de Naruto, la rama principal de ese clan era

idiota, ya que según sus recuerdos, simplemente se plantaron frente al arma y

esperaron a ser derrotados.

—¿Quién eres y cómo has llegado aquí? —preguntó Toneri,

protegiéndose con el Tenseiga al ver a Naruto acercarse.

Naruto avanzó hacia él y, sin decir palabra, extrajo su alma

y la absorbió. Naruto sabía que para convencer a Toneri de no destruir la

Tierra, necesitaría la intervención de Homura Otsutsuki, pero convocarlo no era

algo que Naruto pudiera hacer a voluntad…

El fantasma de Homura Otsutsuki apareció a su lado y miró el

cadáver de Toneri, luego a Naruto.

—Dejar la protección de este mundo solo en tus manos puede

causar un desastre —advirtió el fantasma del anciano. Naruto hizo una mueca, ya

que según sus recuerdos, Toneri solo había creado planes sobre el engendro de

Boruto.

—La seguridad del mundo no está solo en mis manos, sino en

las de los nueve bijus, a quienes les daré cuerpos propios, como ya hice con

Kurama —dijo Naruto.

En términos de poder, los bijus eran miles de veces más

poderosos que cualquier ninja, y siempre que tuvieran un cuerpo, serían

invencibles.

Naruto también podía acelerar su resurrección con el uso de

la marca Karma y sus clones, por lo que no necesitaba más ayuda. Homura iba a

hablar, pero Hagoromo apareció a su lado.

—Ha hecho muchos progresos por su cuenta —dijo Hagoromo con

tono neutral. Parecía que esto se había convertido en una reunión de viejos.

—Viejos, no se preocupen. A diferencia de ustedes, tengo

mucha información útil y pronto este mundo cambiará, espero que para mejor

—dijo Naruto. El fantasma de Homura suspiró.

—Esperemos que así sea —dijo Homura y tocó su hombro

izquierdo. Hagoromo tocó su hombro derecho.

—Ahora serás el guardián de nuestros legados —dijo Hagoromo,

y Naruto recibió una multitud de conocimientos que provenían de ambos ancianos

y representaban su comprensión de este mundo.

—El futuro de este mundo ahora depende de ti —dijo Homura, y

ambos ancianos desaparecieron.

El poder que recibió combinado no alcanzaba ni el cinco por

ciento de lo que Naruto ya poseía. Aunque no se podía subestimar, Naruto

valoraba más los conocimientos en cuanto al funcionamiento del poder, porque

Homura y Hagoromo habían nacido en este mundo y para ellos el poder fue algo

que obtuvieron con el tiempo, no eran como los Otsutsukis, que obtenían

aumentos repentinos cada vez que comían una fruta de chakra.

Naruto envió el Tenseiga a su dimensión personal y destruyó

el palacio de la luna para hacer una tumba para Toneri y el clan Otsutsuki de

la luna. Luego, Naruto regresó a la Tierra.

Con los cabos sueltos de Akatsuki y los Bijus resueltos, todo

estaba listo para comenzar su plan de conquista mundial.

Un mes después, Naruto estaba en el techo de la mansión Hyuga

junto a Hinata. Era por la mañana y observaban el amanecer.

—Está comenzando —dijo Naruto cuando el sol pareció perder su

brillo, y la mitad del cielo se convirtió en un palacio rodeado por un ejército

que llevaba la imagen de Nagato y vestía las capas negras con nubes rojas de

Akatsuki. El ejército parecía un enjambre de cientos de miles de hormigas.

—Yo soy Nagato, Heredero de Hagoromo, el sabio de los Seis

Caminos —se escuchó una voz de fondo.

Hinata lo miró y Naruto asintió para confirmarle que él

estaba detrás de esto. No directamente, pero uno de sus clones. La voz continuó

hablando:

—Desde el nacimiento de la humanidad en este mundo, las

guerras y la destrucción que han provocado nunca han cesado. Pero hoy estoy

aquí, no para decirles que esta parte de nuestra historia quedará atrás, sino

para decirles que este será el día en que la paz comience, porque yo, el

emperador de este mundo, por la voluntad de su dios guardián, así lo decreto.

»A partir de hoy, solo habrá un señor y ese seré yo —dijo la

voz, y la imagen cambió a la de Nagato sentado en un trono dorado, con Konan y

Yahiko de pie frente a él. Pero no estaban solos, ya que frente a ellos se

encontraban los daimios de los diferentes países arrodillados junto a sus

principales señores feudales.

—A partir de hoy, no habrá más señores que yo y la

meritocracia regirá el mundo bajo mi administración y mis leyes. Todos aquellos

que habitan este mundo serán sus propios señores y estarán bajo mi protección.

Todos serán responsables de sí mismos y la paz del mundo estará en manos de

todos —declaró Nagato, y su imagen desapareció del cielo.

Dos horas después, un clon de Nagato llegó a la aldea para

negociar un acuerdo militar con el emperador. Este acuerdo consistiría en

mantener a los ninjas en las aldeas ninja. No se les permitiría a los ninjas

vivir en las ciudades y cualquiera que lo hiciera debería renunciar a su chakra

y habilidades primero. Los ninjas renegados serían cazados.

En cuanto a las aldeas, serían el poder militar detrás del

emperador, quien no crearía un ejército, ya que eso solo generaría más armas y

un desarrollo armamentístico que, al final, solo aumentaría la guerra y la

disponibilidad de armas para causar conflictos.

La seguridad estaría a cargo de un cuerpo de policía que se

encargaría de los criminales comunes, mientras que las bandas de saqueadores y

bandidos organizados, así como los ejércitos privados o ninjas renegados,

estarían bajo la responsabilidad de las aldeas ninjas.

Estas aldeas también podrían aceptar encargos de

guardaespaldas por solicitud civil. La investigación privada también podría ser

aceptada, pero los asesinatos de personas no criminales estarían prohibidos, ya

que rompería el tratado si las aldeas ninjas atacaban a ciudadanos inocentes

del imperio.

En el tratado, también se prohibían las guerras ninjas,

aunque la administración de justicia y la independencia de las aldeas ninjas

seguirían como hasta ahora. Las reglas impuestas a las aldeas ninjas solo

afectaban sus relaciones con el imperio y sus ciudadanos, no su funcionamiento

interno. Y al igual que en el tratado con los señores feudales, cualquier

desobediencia o violación del acuerdo significaría el fin del patrocinio y las

relaciones económicas. Teniendo en cuenta que ahora el gobierno del continente

era uno solo, esto llevaría a la ruina y desaparición de cualquier aldea.

Tsunade y los jefes de clan aceptaron el tratado, ya que

sabían que no tenían otra opción, aunque se sentían más seguros que el resto de

las aldeas, porque Naruto estaba allí en caso de que el emperador enloqueciera

en algún momento. Naruto solo podía parpadear, porque en realidad, él era la

mente maestra detrás de todo.

Un año después, Naruto ya se había casado con Hinata, y

cuatro años después nació su primera hija. El imperio ya había establecido sus

bases, y más del noventa por ciento de sus ciudadanos elogiaban sus nuevos

derechos y oportunidades. Aquellos que no estaban contentos eran los señores

feudales y sus familias, que perdieron todo su poder y la mayoría de sus

posesiones, ellos habían sido eran dueños de ciudades enteras.

Las conspiraciones y rebeliones eran comunes, pero con las

aldeas ninjas trabajando en ellas, solo aceleraban su caída y perdían cada vez

más recursos económicos y propiedades con cada rebelión.

Nada de esto importaba a Naruto, quien vivía en paz como jefe

de la Raíz del ANBU en Konoha. Él no tenía nada que ver con la administración

del imperio, y sus únicas responsabilidades eran con Konoha.

Naruto no estaba completamente relajado, ya que aún quedaban

cabos sueltos antes de la llegada de los Otsutsukis, y justo hoy planeaba

resolverlos, ya que sus clones habían capturado dos objetivos prioritarios.

Para encontrarse con ellos, Naruto había realizado un desplazamiento

espacial y ahora se encontraba en un gran edificio metálico en la aldea de la

lluvia, que en los últimos cinco años había surgido como ninguna otra. Sus

habitantes se enorgullecían de que el actual emperador fuera un ninja nacido en

su aldea, ya que una de sus servidoras era el ángel conocido como Konan, la

antigua mano derecha de su líder.

El hecho de que su ciudad se hubiera convertido en el punto

de reunión del mundo ninja y que las principales aldeas ninjas les hicieran

regalos de vez en cuando solo confirmaba su teoría. Esta era una ciudad llena

de oportunidades, y ahora que las guerras ninjas estaban prohibidas, se estaba

convirtiendo en un centro de comercio seguro entre las aldeas.

La ciudad contaba con una fuerza de seguridad secreta de la

que los ninjas de nivel Jōnin estaban al tanto. Ellos sabían que Nagato, el

actual emperador, era el antiguo líder de esta aldea, y aquel que quisiera

causar problemas allí mejor llevaría un ataúd a su espalda, ya que todos los

que lo habían intentado habían muerto.

Viendo cómo la ciudad florecía con el comercio del mundo

ninja, las reuniones, la firma de acuerdos y la simple recreación y diversión

de los ninjas, Naruto observó con una sonrisa. Parecía que Pain estaba

destinado a ser olvidado.

Naruto estaba en la habitación de un hotel, y sus clones

mantenían a dos hombres de rodillas en el suelo.

Uno de ellos era un Otsutsuki llamado Isshiki, y el otro era

un humano que se hacía llamar Amado. Ambos hombres habían estado bajo la

vigilancia de sus clones durante varios años, y ahora ya no era útil dejarlos

en libertad, ya que el Dr. Amado ya había obtenido lo que él quería, que era el

cadáver del dios Otsutsuki, lo que significaba que estos dos hombres ya no

tenían ninguna utilidad para él.

—¿Quién eres? —gruñó Isshiki mientras miraba a Naruto a los

ojos. Él estaba completamente sellado y vigilado por sus clones en todo momento.

Naruto dio un paso adelante y colocó sus manos sobre la

cabeza de ambos hombres.

—No, espera… —el Dr. Amado trató de hablar, pero Naruto no

sentía ganas de explicarle nada a un par de cadáveres, así que asimiló sus

almas y todos sus conocimientos. Luego, sus clones empaquetaron sus cuerpos

para llevarlos a su laboratorio.

Con el alma del Dr. Amado y la de Isshiki asimiladas, Naruto

se apoderó del cadáver del dios Otsutsuki, obteniendo habilidades muy útiles,

como la Omnipotencia, una habilidad Otsutsuki que le permitía cambiar la

realidad, y un dojutsu definitivo que podía alterar la percepción de la gente y

sus recuerdos en este mundo.

Naruto obtuvo la Omniciencia, que le permitía saberlo todo y

verlo todo en todo momento, pero solo desde el momento de su nacimiento en este

mundo, no podía ir más allá. Otra habilidad divina que obtuvo fue el Karma, que

devolvía cualquier ataque a su persona a su atacante.

Por último, al estudiar el cuerpo de Isshiki, Naruto obtuvo

todas sus habilidades, incluyendo sus doujutsus divinos que le permitían

desplazarse entre dimensiones, cambiar el tamaño de las cosas y una habilidad

sobresaliente para el genjutsu. Como bonificación, Naruto obtuvo el Juubi de

Isshiki, aunque él ya no necesitaba el cuerpo de un Juubi y no podía mejorar

más su cuerpo con él, por lo que lo convirtió en una semilla del árbol de la

vida y lo guardó, quizás algún día sería útil.

Los años pasaron y finalmente los Otsutsukis llegaron, pero

apenas cruzaron las puertas dimensionales hacia el mundo ninja, un millón de

clones saltaron sobre ellos, los sellaron y luego los llevaron ante Naruto para

que fueran asimilados.

Así, veinte años después de llegar a este mundo, Naruto había

cumplido su objetivo de convertirse en un verdadero “Gary Stu” en este mundo,

sin tener ningún rival y viviendo a placer, rodeado de lujos y sin

preocupaciones. Ahora también había resuelto los últimos cabos sueltos al

capturar y asimilar a los Otsutsukis restantes.

En estos años, Naruto había tenido otras dos hijas y era

realmente feliz al lado de Hinata. Sin embargo, una parte de él se sentía

vacía, desesperanzada y insegura.

Esa parte de Naruto era el «Viajero», un alma errante que

chocó con su propia alma y que no podía recordar su propio nombre, pero sí a su

familia, su propia muerte, arrepentimientos y pesares. Y nada de lo que Naruto

obtuviera en este mundo podía llenar ese vacío.

El Viajero deseaba continuar su viaje, por lo que Naruto

construyó un segundo laboratorio secreto y comenzó a experimentar con el poder

para abrir dimensiones de los Otsutsukis, con la esperanza de encontrar la

forma de abrir un portal dimensional hacia el mundo del Viajero. Con estos

experimentos, el alma del Viajero volvió a la calma.

Naruto tenía otros objetivos con estos experimentos y los

viajes a otras dimensiones realizados por sus clones. Él quería descubrir si

había más Otsutsukis dispersos por ahí y también detectar cualquier peligro

para el mundo ninja, que era su hogar y el de su familia.

Cincuenta años después de que su alma se fusionara con la del

Viajero, Naruto salió de una cápsula. Él se miró a sí mismo y tenía la

apariencia de un hombre de veinticinco años, con un cuerpo atlético y ojos

azules, ya que su ojo definitivo no estaba activo.

Naruto cubrió su cuerpo con chakra y este se transformó en

sus ropas, luciendo una bata de médico con llamas y la palabra “Raíz” en la

espalda. Luego, miró hacia un lado, donde otra cápsula se abrió revelando a un

hombre con una apariencia similar…

No era exactamente la misma apariencia. Naruto frunció el

ceño y el hombre llevó su mano a la cabeza, acariciando su cabello rubio, que

era lacio y sedoso, dándole un aspecto completamente diferente. El hombre

también cubrió su cuerpo con chakra, materializándose en unos zapatos

deportivos y una franela, vistiendo un look casual de otro mundo.

—No me gusta el cabello rebelde —dijo el Hombre. Su

aclaración era innecesaria, porque ellos dos eran la misma persona, y Naruto ya

conocía sus pensamientos.

Ellos habían intentado separar sus almas durante décadas,

pero al final no fue posible. Ellos eran la misma persona, la misma alma,

inmutable e inseparable. Lo que no era igual eran sus mentes.

Al final lo que lograron hacer fue dividir su alma y

colocarla en dos cuerpos, con una conciencia dominante sobre la otra. Este

cuerpo estaba dominado por él, y el otro por el Viajero. Sin embargo, no había

diferencias entre ellos, seguían siendo la misma persona, compartiendo su

visión, pensamientos y experiencias, incluso sin usar el Rinnegan.

La única diferencia era que en un cuerpo una conciencia

elegía permanecer separada, mientras que en el otro era dominante, lo que

provocaba un cambio brusco en la personalidad, como el Viajero ya había

demostrado.

Su expresión también era diferente, incluso sus ojos, ya que

mostraban apatía y cansancio. El Viajero era un hombre atormentado y no

encontraba paz en este mundo, que no consideraba suyo. Por eso habían llegado a

esta decisión radical de dividir su alma, lo cual lograron hacer utilizando a

los diez colas como materiales para crear otro cuerpo. Su humanidad había

quedado atrás hace mucho tiempo. Aun así, lo más radical de su decisión vendría

en ese momento.

—¿Estás seguro de esto? —preguntó Naruto, aunque ya conocía

la respuesta, ya que compartían los mismos pensamientos. Además, él tenía más

de setenta años y había estado junto al Viajero durante más de sesenta años,

por lo que su actual decisión le dolía.

—Mi existencia no tiene sentido en este mundo. No tengo nada

por lo que seguir existiendo —respondió el Viajero. Él levantó la mano—. Sé que

no estás de acuerdo con eso, pero es mi forma de pensar. Yo soy… —el Viajero

había olvidado su nombre y gran parte de su pasado—. Ni siquiera sé quién soy

—dijo con abatimiento y cansancio.

Naruto pensó que si esa era la voluntad de este individuo,

cuando había olvidado parte de su vida, en su mundo debió ser alguien muy

“especial”. El Viajero sonrió.

—Sí, yo era la definición de terquedad, incapaz de renunciar

a nada, ni siquiera a mi propia vida. Quizás por eso llegué a este lugar, pero

no puedo dejarlo atrás. Vivir habiendo fracasado no es posible para mí —dijo el

Viajero. En opinión de Naruto, eso era la definición de ser terco sin remedio.

—Podemos seguir adelante, aunque hayamos sufrido pérdidas

—dijo Naruto pensando en sus propios padres.

—Ahora eres un dios, y no hay nada que te impida traerlos de

vuelta. Puedes dejar el miedo detrás, ellos estarán orgullosos de ti —dijo el

Viajero.

—No es solo eso. ¿Tenemos el derecho de hacerlo? ¿Cumplir

nuestros caprichos solo porque es algo que podemos hacer? —preguntó Naruto.

—Filosofía Hippie. ¡Basura! —sentenció el Viajero con

desprecio—. Nadie en este mundo quiere morir, por lo cual, también es imposible

que alguien acepte su muerte —sentenció el Viajero.

Naruto se mordió la lengua para no decir nada, porque sus

palabras les harían daño a los dos, más a él que al Viajero. El Viajero bufó

suavemente.

—Sigues siendo un niño —dijo con pesar—. Elijo morir porque

vivir no tiene sentido para mí. Elijo morir porque es preferible al

sufrimiento. No deseo morir, deseo dejar de sufrir. Nadie desea morir, y si la

muerte es una opción, siempre es debido a razones externas.

»Por eso, no dudes. Trae a tus padres de vuelta. No era su

destino morir, no habían aceptado sus muertes, no son felices estando muertos,

y no es tu realidad tener que aceptar sus muertes porque eres un dios en este

mundo.

»Y si un dios no puede permitirse ser egoísta con las cosas

que quiere, lo que les queda a los simples mortales es la desesperanza y el

arrepentimiento eterno —dijo el Viajero. Naruto se estremeció.

Antes de la llegada del Viajero, él era uno de esos humanos a

los que solo les quedaba aceptar la realidad, y aunque su potencial era

ilimitado, él no lo sabía y se obligaba a sí mismo a seguir adelante con la

esperanza de que algún día todo cambiaría.

Fue la esperanza lo que lo hizo a Naruto avanzar en su

situación desesperada. Era la esperanza lo que lo mantenía y perderla habría

sido su ruina. Como lo sería para cualquier humano que se negara a avanzar.

En la vida de las personas, era la esperanza lo que las

mantenía, impulsaba sus sueños, objetivos y propósitos. Era algo a lo que no

podías renunciar porque hacerlo significaba el fin. Y eso era el Viajero ahora,

él había perdido la esperanza o, para ser exactos, en este mundo ya no tenía

ninguna esperanza. Por lo tanto, si su plan actual fallaba, él renunciaría a

todo, borraría su propia conciencia y dejaría de existir.

—… —Naruto parpadeó. Iba a desearle suerte, pero “Viajero” no

era un nombre. El Viajero asintió.

—No soy nada, pero aún soy algo, y también soy tú. Hasta el

día en que tenga mi propio nombre, seré Xión —sentenció el Viajero.

—Entonces, buena suerte, Xión —dijo Naruto, rezando para no

tener que borrar parte de su propia conciencia y sintiendo la misma

desesperación que Xión, porque este último plan desesperado funcionara.

Naruto y Xión dieron un paso para moverse a través del

espacio hacia una parte de su laboratorio que estaba en el otro lado del

planeta, a diez mil metros de profundidad.

En el lugar solo había una habitación de cien metros de

largo, cien de alto y cien de profundidad, llena de computadoras por todas

partes. Estos artefactos tecnológicos estaban alimentados por chakra, y la

mayoría de sus funciones dependían de él. Las computadoras estaban distribuidas

a lo largo de las paredes, operadas por doscientos clones. En el centro, había

un enorme artefacto circular con una base plana, sobre el cual flotaba una

esfera de agua de diez metros de diámetro.

La plataforma estaba conectada con todo tipo de cables que

salían de las computadoras adyacentes, y treinta clones estaban sentados

alrededor con los ojos cerrados, en perfecta sincronía, aportando su chakra y

poder de forma constante, ya que el material de construcción de la plataforma

era un metal conductor de chakra creado por el Rinnegan, convirtiendo toda la

sala en una extensión de su propio cuerpo.

El artefacto en sí mismo era una especialización de algunas

de sus habilidades, como la apertura de portales dimensionales y la

manipulación temporal, uno de los jutsus que habían aprendido durante su

estudio de este mundo y sus ruinas.

Eran estas habilidades las que habían mantenido viva la

esperanza de Xión y lo que los había llevado a crear este artefacto de viaje

dimensional, con la esperanza de que los llevara de vuelta al mundo de Xión.

Durante veinte años, ellos habían investigado otras

dimensiones, pero nunca habían logrado encontrar algo similar a la dimensión de

Xión.

Eso había cambiado hace un año, cuando descubrieron un mundo

que era conocido, aunque para Xión era ficticio, esto le dio esperanzas de

encontrar su propio mundo. Aun así, no se aventuraron sin planificar y

evaluaron todas las posibilidades.

Si este mundo era real, otros también lo serían, por lo que

debían tener cuidado de no adentrarse en mundos con seres demasiado peligrosos

que pudieran borrarlos de la existencia.

Naruto tuvo mucho cuidado al encontrar su primer mundo

conocido, pero después de considerar los pros y los contras, decidió que no

había peligro y envió a un clon a ese mundo. Era un mundo similar a la antigua

tierra de Xión, pero estaba en medio de una guerra contra las máquinas, lo cual

lo hacía inconfundible: era el mundo de los exterminadores.

Xión pensó que sería un buen comienzo comenzar en un mundo

pequeño donde no corriera demasiado peligro, y además, la tecnología de ese

mundo no era algo que pudiera despreciar, ya que contaban con supercomputadoras

e incluso máquinas inteligentes. Por eso él decidió probar allí.

Una vez tomada su decisión, Naruto envió a un clon, pero

después de un minuto frunció el ceño al enterarse de que el clon fue destruido

en el camino. Naruto parpadeó y revisó los datos del portal que había abierto.

Según el sensor, el portal era inestable. Naruto hizo una

mueca, era la primera vez que se reportaba un portal como inestable, pero él

podría solucionarlo. Con la ayuda de sus clones, creó un portal tan estable

como el artefacto sensor que mantenía el contacto con la otra dimensión. Luego

envió otro clon.

Esta vez él clon tardó cinco minutos en ser destruido. Naruto

parpadeó, entendiendo el problema. Era fácil de entender, ya que para otros

mundos similares al mundo ninja, el viaje no tomaría más de diez segundos. Sin

embargo, en este caso, el primer intento duró un minuto y el segundo, cinco

minutos, lo cual implicaba que el clon no se mantenía intacto para poder llegar

a su destino.

El problema era evidente: la dimensión estaba demasiado

lejos. El viaje era demasiado para su cuerpo actual. A pesar de que su cuerpo

era capaz de resistir una explosión nuclear, no podía soportar el viaje entre

dimensiones. Naruto suspiró.

La respuesta era clara: él necesitaba algo más grande, algo

que no se desgastara, pero ya estaban al límite en ese aspecto. Naruto no podía

enviar una fortaleza a través de una fisura dimensional, y no quería ni

siquiera pensar en las criaturas que podría atraer si hiciera un escándalo y

llamara la atención.

Si el mundo ninja era real y el mundo de los exterminadores

era real, ¿qué sucedería con los mundos de horror de HP Lovecraft y sus

horrores cósmicos? Naruto no quería llamar la atención de seres así, por lo que

debía mantener un perfil bajo.

El problema con esto era que él tenía que ir a uno de esos

mundos lejanos y explorar la existencia en busca de un camino de regreso a casa

para Xión.

Naruto no se dio por vencido y, un año después, tenía una

solución en sus manos. Su solución consistía en dividir su alma, crear otro

cuerpo y convertir ese cuerpo en un paquete de células utilizando capas de

sellos. En ese paquete estarían almacenadas su alma y su conciencia. Este era

un jutsu de marionetista desarrollado por Sasori de la Arena, pero eso no era

todo.

El paquete de células seguramente sería destruido durante el

viaje, y aunque mantendría un puñado de células para preservar su mente y su

alma, eso no sería suficiente para mantenerlo con vida. Por lo tanto, su plan

de invasión dimensional tenía otra parte, que consistía en seleccionar un

objetivo al llegar para infiltrarse en su cuerpo, plantando sus células en el

momento de la apertura de la dimensión, y ejecutando la habilidad de asimilar

almas combinada con el jutsu de robo de cuerpos desarrollado por Orochimaru,

para tomar posesión del cuerpo de un nativo de la dimensión a invadir.

De esta manera, Xion tendría un cuerpo y la misión de

invasión sería un éxito. Ellos no se preocupaban por los muertos en este

proceso, porque una vez recuperados, ellos podrían traer de vuelta a la persona

afectada y también compensarla.

Una vez que su plan fue decidido, aún faltaba decidir a qué

mundo iría Xion, ya que en el último año había descubierto varios mundos

tecnológicos más.

Estos mundos eran: Star Trek, Stargate y Warhammer 40K. Entre

estos tres mundos, en Star Trek, estaban los Q, unos individuos poderosos que,

al igual que él, tenían omnisciencia a nivel galáctico, más allá de la suya.

Los Q tenían tecnología divina y su poder para manipular la

realidad estaba respaldado por todo tipo de conocimientos divinos. Por esa

razón, sin duda lo encontrarían al llegar, por lo que Star Trek estaba

descartado.

Warhammer 40K era un mundo avanzado con armas mucho más

poderosas que Star Trek, pero también había entidades divinas que lo

encontrarían al llegar. Por lo tanto, llegar allí sería una idea terrible.

Por último, estaba el mundo de Stargate, cuya tecnología era

más avanzada que la de Star Trek y comparable a la de Warhammer 40K. Por otro

lado, las entidades divinas de este universo no eran omniscientes y a menudo

pasaban por alto cosas pequeñas o las ignoraban a propósito, siempre y cuando

él no jugara con la realidad. Este mundo le ofrecía las mejores posibilidades.

En cuanto a si Xion se equivocaba y lo descubrían, esperaba

poder negociar, ya que su punto de llegada sería la galaxia de la Vía Láctea,

donde los antiguos tenían reglas estrictas y no interferían en asuntos del

plano material. Si Anubis fue capaz de mantener su existencia, Xion no tendría

problemas.

Esto no significaba que no estuviera en peligro, ya que si

por mala suerte alguien tomaba su alma, sería su fin. Él no era el único dios

capaz de manipular almas. No sabía si los Q podían hacerlo, pero los horrores

de HP Lovecraft y los dioses de Warhammer sí tenían esa capacidad. Por eso, sus

universos era mil veces más peligroso para ellos que el de Stargate.

Una semana después, y después de haber preparado todo para

ejecutar su plan, incluyendo la creación de un nuevo cuerpo, Naruto y Xión

estaban frente al portal que mostraba el mundo de Stargate, que sería su primer

objetivo a explorar en busca de un camino más cercano al mundo original de

Xión.

Xión creó diez clones y usaron el jutsu de creación de todas

las cosas en él para convertirlo en un paquete de células sellado, lo

suficiente para reproducirse en un cuerpo nativo y recrear su cuerpo original.

Naruto tomó el paquete sellado, un cilindro de veinte

centímetros de diámetro, y acercándose al portal, lo envió sin dudarlo, ya que

todo estaba preparado, desde el cuerpo objetivo hasta la línea de tiempo a la

que llegaría.

Al ser lanzado al portal, Xión viajó por un túnel

dimensional, con terribles fuerzas espaciales y temporales, que estaban fuera

de toda escala de poder para él y que no podía siquiera soñar con manipular o

tratar de manipular.

Xión viajó por cinco minutos, perdiendo todas sus capas de

protección de sellos, pero al final logró su objetivo, cuando sus pocas células

supervivientes entraron al cuerpo objetivo, asimilando su alma y completando la

primera fase del plan.

—¡Sí! —exclamó Naruto, pero medio segundo después, su corazón

se saltó varios latidos.

La conexión entre él y Xión se había roto, no, él seguía

siendo Naruto y también Xión, pero la mitad de su alma en el otro mundo ya no

estaba unida a él.

—La asimilación se ha completado, no pudimos haber fallado…

—el clon dejó de hablar cuando el portal se cerró. Antes de cerrarse, una

criatura hecha de energía había llegado al lugar donde yacía el cuerpo de su

objetivo de asimilación.

«Un Ascendido», pensó Naruto. Estos seres eran capaces de

manipular la realidad a nivel planetario, y no eran en lo absoluto inferiores a

él en poder. De hecho, los Ori, que también eran Ascendidos, eran capaces de

traer a la gente de la muerte a voluntad, al igual que él. No había nada que él

pudiera hacer que un Ascendido no pudiera imitar… bueno, ellos no podían hacer

clones de sombra, o eso imaginaba él.

Naruto apretó los puños con desesperación, pero la parte de

Xión que seguía con él estaba contenta y feliz, por lo que Naruto se sintió

desconcertado…

La infiltración fue un éxito, y el Ascendido solo cerró el

portal y su conexión, no convirtió a su objetivo en cenizas, para deshacerse de

él. En resumen, no pensaban matarlo, ni siquiera le habían tocado, y mientras

le dejaran quedarse, había esperanzas de triunfar.

—¡Bien! —exclamó Naruto, y los clones vitorearon. Ahora solo

tenían que esperar la comunicación de Xión, aunque si los Ascendidos le

causaban problemas, esto podía llevar algún tiempo.

Era posible que no le permitieran usar sus habilidades o su

poder estando en su galaxia, por lo que Xion tendría que salir de allí.

Considerando que habían tomado el cuerpo de un humano, eso podría llevarle

años. Ellos no habían elegido a un Goa’uld como objetivo porque estos seres

tenían un sistema inmunológico muy avanzado y eran capaces incluso de combatir

el cáncer. No se conocía ningún virus capaz de hacerles frente.

Esto significaba que era posible que sus células fueran

destruidas, y sin ellas, sería imposible recrear su cuerpo, aunque su alma

tuviera éxito en asimilar su objetivo. Ellos solo tenían una oportunidad y no

podían correr ese riesgo, por lo que ni siquiera intentaron buscar a un Goa’uld

para tomar su cuerpo.

El riesgo era igual para las otras especies avanzadas de este

universo, ya que aunque sus defensas biológicas no eran mucho, su tecnología

podía rastrear sus células y destruirlas. Tal era el caso de los Tollan o los

Asgard, por lo que también fueron descartados. Ellos optaron por elegir a un

humano de la Tierra, cuya tecnología no podía rastrearlos y cuyo sistema

inmunológico no tenía las cualificaciones para resistir el cambio de sus

células divinas.

Naruto sonrió, y con la esperanza renovada de Xión, ellos

solo tenían que esperar los resultados, expectantes por las posibilidades.

Nota del autor 1: Hola a todos. Este es el final de este

volumen y universo. El siguiente volumen será Stargate Xión, del Viajero, en el

universo de Stargate. Al igual que este, el próximo volumen estará separado de

Naruto y no incluirá jutsus ni elementos del mundo de Naruto. Además, tengo

otros volúmenes completos basados en los mundos de ATG, Star Wars, Warhamer 40K,

y otros universos que he leído en libros, películas y series de televisión, que

me han gustado. Cuatro de estos volúmenes ya están publicados en español, por

lo que solo debo hacer las traducciones, y la velocidad de publicación será

rápida, hasta alcanzar el volumen actual, que es Star Wars.

Nota del autor 2: Con respecto a la forma de escribir, como

mencioné antes, no serán crossovers, al menos en los primeros cuatro universos

y, si el mundo es medieval, no habrá naves espaciales en él. Sin embargo, habrá

algunas ventajas dependiendo del mundo, como la experiencia del personaje, su

inteligencia, carácter y algunos conocimientos que puedan adaptarse. Para esto,

he creado reglas que podrán ver en el primer capítulo del siguiente volumen, ya

que forman parte de la trama y no quiero hacer spoilers para aquellos que

deseen leerlo.

Nota del Autor 4: Por último, no todos los volúmenes serán

una fusión de almas. Por ejemplo, en el siguiente volumen, solo estará Xión (la

mezcla actual de Naruto y el Viajero).

 

More Chapters